Día Internacional del Té: descubre el impacto de cada taza y apuesta por el té de Comercio Justo.
Cada 21 de mayo se celebra el Día Internacional del Té, una ocasión perfecta para reconocer el valor económico, social y cultural de esta bebida milenaria. En nuestro país, su consumo es muy bajo si lo comparamos con Turquía (el mayor bebedor de té del mundo), Gran Bretaña (y su famoso té de las 5) o China, la cuna del té. Aunque poco a poco se va introduciendo en más familias, pues beber té son solo ventajas para tu salud y estado de ánimo.
Y detrás de cada taza de té hay mucho más que aroma, sabor, salud y una pausa: hay millones de personas que lo cultivan, sobre todo en países del Sur Global, en condiciones que no siempre son justas ni sostenibles (la verdad, que en la mayoría de los casos son injustas, procedentes de un pasado colonias del siglo XX)
En EquiMercado, apostamos por un modelo diferente: el del té de Comercio Justo y ecológico, que pone en el centro a las personas y al planeta. Te invitamos a descubrir su historia, sus retos y cómo puedes formar parte del cambio, tacita a tacita (como aquel anuncio pretérito).
¿Por qué es importante el té en los países del Sur Global?
El té es una de las bebidas más consumidas del mundo, se dice que la segunda después del agua. Su consumo es muy habitual en los países del Sudeste Asiático, China y India, aunque el record de consumo per capita lo ostente Turquía como te decíamos. Y también es un motor económico esencial en países como India, Sri Lanka, Vietnam, Kenia o Bangladesh. Para muchas comunidades rurales, especialmente para miles de mujeres, el cultivo del té es su principal fuente de empleo e ingresos.
Sin embargo, este peso económico no se traduce en justicia para quienes lo producen. Los bajos salarios, la falta de derechos laborales y las malas condiciones de trabajo siguen siendo una realidad habitual en muchas plantaciones convencionales. Especialmente para las mujeres, que realizan los mtrabajos más duros de sol a sol 6 días a la semana.
⚠️ El problema del monocultivo del té
El modelo tradicional de producción de té se basa en monocultivos extensivos. Esas fotos de plantaciones de té que quedan tan bonitas ens insta o en cualqueir folleto turístico, tienen también consecuencias sociales y ambientales graves:
- Empobrecimiento del suelo y pérdida de biodiversidad.
- Uso intensivo de pesticidas, con impactos en la salud y el medioambiente.
- Mayor vulnerabilidad económica frente a crisis climáticas o fluctuaciones del mercado.
- Condiciones laborales precarias y falta de empoderamiento para los pequeños productores.
✅ La alternativa: té de Comercio Justo y ecológico
El Comercio Justo apuesta por relaciones más equilibradas entre productores y consumidores. Normalmente trabaja con pequeños productores que destinan una parte de su tierra para este cultivo, que les genera ingresos constantes y estables durante el año y les dota de una estailidad financiera. Así, cuando eliges un té de Comercio Justo y ecológico, estás apoyando:
- Precios justos y estables para las comunidades productoras, normalmente familares
- Primas sociales para invertir en salud, educación o infraestructuras.
- Igualdad de género y condiciones laborales dignas. Los hombres también realizan los trabajos más duros
- Respeto por el medio ambiente, con cultivos más sostenibles y ecológicos.
Y de forma natural, los tes cuentan ambién con certificación ecológica, lo que significa que están cultivados sin pesticidas ni químicos dañinos, cuidando tanto tu salud como la del planeta.
? ¿Quieres empezar a consumir té con impacto positivo?
Explora nuestra selección de tés ecológicos de Comercio Justo y elige el que mejor se adapte a tu gusto.
Té que cambia vidas: conoce a las comunidades productoras
En EquiMercado colaboramos con cooperativas de países como India, Sri Lanka, Vietnam, China, Nepal... que cultivan y elaboran té bajo criterios de Comercio Justo. Estos grupos y cooperativas, formados en su mayoría por mujeres, han logrado mejorar su calidad de vida gracias a la organización colectiva, la formación técnica y el acceso a un mercado que valora su trabajo.
Cada vez que compras un té negro ecológico o un té verde de Comercio Justo, estás apoyando este modelo de desarrollo local sostenible.
Conclusión: tu taza también cuenta
El Día Internacional del Té es una oportunidad para disfrutar de tu bebida favorita, pero también para reflexionar sobre su origen. En un mundo cada vez más interconectado, nuestras decisiones de consumo tienen un impacto real.
Si quieres contribuir a un sistema más justo y sostenible, elige té ecológico y de Comercio Justo. Porque cada taza puede ser un acto de solidaridad.